Blog

Gobernanza corporativa: del cumplimiento a la creación de valor sostenible

Compartir

Durante años, hablar de gobernanza parecía un tema reservado para grandes corporativos.
Sin embargo, hoy comprendemos que la gobernanza no es solo un requisito legal, sino un sistema vivo de principios, decisiones y conductas que construyen confianza y sostenibilidad.

La sesión que tuvimos con Mariel Hawley, me llevó a entender que la gobernanza no es solo una estructura rígida, sino el arte de dirigir con propósito y ética, creando valor económico, social y humano al mismo tiempo.

⚖️ Más allá del cumplimiento 
La gobernanza va más allá de cumplir normas: es el equilibrio entre los intereses de todas las partes. 
Mientras que la función de compliance es buscar prevenir, monitorear y corregir incumplimientos que podrían generar sanciones legales o daño reputacional, la gobernanza establece el rumbo, alineando la estrategia con los valores y el propósito. 

Estudios de EY demuestran que las empresas con sistemas de gobernanza robustos enfrentan menor riesgo reputacional y muestran mayor resiliencia ante crisis. 

La gobernanza es creadora de valor sostenible en múltiples ámbitos —económico, social, ambiental, ético y reputacional—. 
No se trata solo de cómo operan las empresas, sino de cómo deciden, se relacionan y permanecen en equilibrio con su entorno.

🌱 Ética y propósito: el alma de la gobernanza 
La ética es el fundamento de la gobernanza corporativa, pues le otorga ese sentido de colectividad e interdependencia que hace posible la convivencia y la evolución dentro de las organizaciones. 

El PROPÓSITO es el que guía y marca el camino, es el alma de la gobernanza. 
Cuando las decisiones están alineadas con el propósito, se fortalece la confianza y se genera valor sostenible a largo plazo. 

Como consejer@s, debemos ser congruentes con nuestros propios valores, asegurando que las decisiones que tomamos en el consejo reflejen esa misma coherencia.

🧭 Gobernanza proactiva: anticipar, adaptarse y liderar 
Vivimos en una era donde la velocidad de los cambios genera incertidumbre y, con ella, ansiedad. 

Nos enfrentamos a múltiples desafíos en esta era de cambio acelerado. 
Aunque México ha avanzado en la regulación de la inteligencia artificial, aún existen vacíos legales y zonas grises que ponen a prueba nuestra capacidad de adaptación. 
En este contexto, la gobernanza se vuelve esencial para navegar con ética y estrategia, anticipando riesgos donde la ley aún no llega. 

Una empresa con buena gobernanza no reacciona ante la crisis: la prevé, la comprende y la convierte en oportunidad.

🏛️ Estructura de la gobernanza y tipos de consejo 
La gobernanza de una empresa actúa en dos ámbitos: 
– Hacia adentro, construyendo cultura, propósito y toma de decisiones. 
– Hacia afuera, proyectando confianza y credibilidad ante el entorno. 

Existen distintos tipos de consejos, cada uno con responsabilidades específicas: 
– El Consejo de Administración tiene poder decisorio y responsabilidad legal. 
– El Consejo Consultivo ofrece asesoría estratégica sin facultades formales. 
– El Consejo Familiar vela por la armonía, la sucesión generacional y los valores del legado. 

En el caso de las empresas que cotizan en bolsa, la ley exige un Consejo de Administración fortalecido, que incluya consejer@s independientes y comités especializados (como auditoría y prácticas societarias). 
Esto garantiza decisiones más objetivas y transparentes, fortaleciendo la confianza del mercado.

💡 El rol actual del consejer@ 
Ser consejer@ hoy implica mucho más que asistir a reuniones o revisar informes. 
Antes de aceptar una invitación para integrarnos a un consejo, debemos conocer la empresa, su propósito, sus socios y su cultura organizacional, y confirmar que sus valores se alinean con los nuestros. 
Solo así nuestra participación será auténtica y coherente. 

Una de las funciones más importantes de l@s consejer@s es escuchar activamente, analizar con profundidad y encontrar soluciones concretas. 
No se trata solo de opinar, sino de contribuir a construir caminos viables que fortalezcan la organización desde la reflexión colectiva. 

También debemos tener la sensibilidad para llevar al consejo a la reflexión, incluso haciendo preguntas incómodas, si eso contribuye a fortalecer la gobernanza interna y externa. 

Uno de los principios esenciales en el ejercicio de l@s consejer@s es la confidencialidad. 
Todo lo que se comparte, analiza o delibera dentro de un consejo debe permanecer en ese entorno, pues la confianza y la reserva son la base que permite un diálogo abierto, transparente y estratégico.

🌍 Diversidad del consejer@ 
Cuando los consejos están integrados por personas con diferentes profesiones y perspectivas, la empresa se fortalece. 
Esa diversidad de conocimientos y experiencias enriquece la toma de decisiones y amplía la visión estratégica. 

El perfil de l@s actuales consejer@s va más allá de la experiencia técnica. 
Hoy se valoran las habilidades humanas: escuchar activamente, ejercer el pensamiento crítico, fomentar la reflexión y mostrarse vulnerables cuando es necesario. 

La verdadera fortaleza de un consejo radica en su humanidad: actuar con empatía, humildad y sencillez, y mantener un enfoque consciente en el otro. 
Solo desde esa conexión genuina es posible construir confianza y tomar decisiones que generen valor real y sostenible.

✨ Conclusión 
La gobernanza es la brújula que nos ayuda a transitar la incertidumbre con coherencia. 
No se trata de tener más controles, sino de tomar mejores decisiones, con sentido, propósito y responsabilidad compartida.

L@s consejer@s somos quienes damos vida a esa brújula, promoviendo la reflexión, el equilibrio y la coherencia en cada decisión que guía el rumbo de la empresa.

Cynthia Serrano

Contáctanos

Queremos hacer equipo contigo para que puedas enfocarte en la estrategia de negocio mientras nosotros te ayudamos a resolver los temas cruciales para el buen funcionamiento de tu empresa.